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Un Trombone Shot consiste en colocar la cámara lejos del elemento central de atención, ajustando el zoom para que se vea a un buen tamaño, e ir acercándola poco a poco, a la vez que se va reduciendo el zoom. De esta forma, el fondo se va acercando mientras que el foco de atención permanece al mismo tamaño.
Existe también la opción inversa, en la que se comienza con la cámara cerca del foco y se va alejando a la vez que se aumenta el zoom. Así el fondo parecerá alejarse.
Esta técnica se utilizó por primera vez en la película Vértigo de Alfred Hitchcock, para transmitir la sensación de vértigo que sentía el protagonista mientras bajaba las escaleras del campanario. Más tarde, Steven Spielberg la utilizó en Tiburón en la escena en la que el policía está sentado en la playa y ve una aleta saliendo del agua, cerca de unos chavalines que se están bañando. Desde entonces se conoció como el 'Spielberg shot' pero el auténtico 'inventor' fue Hitchcock.
Fotógrafo de obras memorables del mudo como
- "El Ladrón de Bagdad" (Raoul Walsh, 1924),
- "En el Viejo Arizona" también de Walsh de 1928, o
- "La Pasión Ciega" del mismo director en 1940 (con una excelente fotografía nocturna de exteriores, prodigiosa, para aquellos años), y sobre todo la maravillosa y mítica
- "Sin Novedad en el Frente" (Lewis Milestone, 1929) y la excelente
- "La Tragedia de la Bounty" (Frank Lloyd, 1935).
Para rematar, suya es también la fotografía de
- "Frankenstein" (James Whale, 1931), de
- "El Halcón Maltés" (John Huston, 1941) y de
- "Casablanca" (Michael Curtiz, 1943).
Célebre por su uso de filtros y difusión, que recibe ya un Oscar en 1927 por su trabajo junto a Charles Rosher en
- "Amanecer" (F.W. Murnau).
Este norteamericano de exquisito gusto, y muy influído por el expresionismo alemán, cosecha, en la década de los treinta, dos obras capitales
- "El Hombre y el Monstruo" (Rouben Mamoulian, 1931) donde se observan perfectamente sus constantes imágenes suaves y
-"El Signo de la Cruz" (Cecil B. de Mille, 1932)